24, una historia de ¿amor?

Hola, mi nombre es león, soy un estudiante común y corriente de una hermosa ciudad.
¿Saben? Las personas del común dicen que hay cosas que solo suceden en sueños; pero yo no lo creo.

En el camino hacia mi colegio hay un gran puente el cual cruza sobre un rio, cierto día de primavera después de muchos años de pasar por ahí por alguna extraña razón, me sentí intrigado por lo bonito que era aquel rio y lo tan alto que estaba sobre el mismo; así que pare y me incline sobre la barra de seguridad del puente para verlo mas de cerca, con tan mala suerte que los tornillos que sostenían esa vieja barra cedieron ya que llevaban un buen tiempo oxidados y debilitados; en ese momento pensé que seria mi fin, mientras caía vi una delgada mano de piel blanca acercarse hacia mi, y sujetándome del brazo paro mi caída, cuando Salí del shock en el cual había quedado por casi perder mi vida, vi el rostro de mi salvadora, una hermosa mujer delgada de pelo negro y ojos verdes, era sin mas ni menos una de las chicas mas hermosas que había visto en el transcurso de mi corta vida, en ese momento quise agradecerle, pero antes de poder mediar palabra, rompió el silencio y me dijo “¡idiota!, si lo vuelves a hacer no me preocupare por salvarte” y con eso se despidió, la vi alejarse; y que gran sorpresa me lleve cuando al fijarme mejor note que llevaba el uniforme de mi colegio.

Pasaron varios días y aunque la buscaba por todo el colegio, no la veía en ningún lugar, debido a esto empecé a indagar sobre ella con todo aquel que pudiera darme información, profesores, alumnos, directivos, hasta con el portero hable y pude hallar información de todo tipo, una muy buena pero otra sinceramente inútil y estúpida, pude averiguar que es un grado mayor que yo, tiene unas muy buenas notas, pero su asistencia es la peor del colegio y cosas extrañas y rumores sobre el por que de su mala asistencia, algunos dicen que es un vampiro y no puede aguantar durante muchos días seguidos la luz del sol, otros dicen que sus padres son millonarios y no es de su agrado que se agrupe con personas de baja clase social. En todo caso son tonterías inventadas por alguien sin nada mejor que hacer, aunque no deja de ser extraño que tenga tan buenas notas cuando su asistencia es tan mala.

Siguieron pasando los días, y diariamente a las horas de los descansos o recesos escolares siempre iba al salón donde se supone esta ella, hasta que cierto día al final de la primavera, pasaba por uno de los pasillos del segundo piso y la volví a ver, como la primera vez quede cautivado por su belleza, se dirigía hacia la biblioteca la cual poco utilizaban los alumnos de ese colegio, así que la seguí, para poder tener la oportunidad de agradecerle por haberme salvado la vida, la seguí hasta la estantería 020, pero al llegar ahí ya no había nadie, así que como la perdí de vista decidí buscar algo que me pudiese interesar y vi una novela que quería leer, era el cuarto libro de izquierda a derecha, cuando lo tome sentí a alguien detrás de mi, era ella la cual me pregunto “¿Qué quieres de mi?” yo sin pensarlo y tartamudeando un poco le respondí “ so-solo quería agradecerte por lo del otro día” a lo cual ella respondió “¿otro día?, a si ya lo recuerdo, solo no lo vuelvas a hacer” después de eso no hablamos mucho, solo me dijo que su nombre era Katherine, y aunque le quise preguntar sobre su asistencia nunca me respondió nada, al despedirse me entrego un papel algo arrugado el cual tenia un teléfono y una dirección algo extraños, ya que ambos terminaban en 24, después de salir de la biblioteca me dispuse a preguntarle de que eran ese teléfono y esa dirección aunque yo ya suponía que eran de su casa, pero una vez mas Katherine había desaparecido del colegio y por mas que la busque no la pude encontrar, de inmediato busque un teléfono del cual poder llamar al número que me había entregado anteriormente, tal sorpresa la que me lleve cuando me contestaron del hospital, pregunte si tenían a alguna interna con el nombre de Katherine, pero me decían que sin el apellido y con tan poca información no podían decirme nada al respecto, después de esto me dirigí a la ultima clase que tenia ese día a de 11:30 a 1:45 pm en la cual mi felicidad se fue al piso cuando me dieron la ultima evaluación que había presentado; un flameante y gran 2.4. evaluación la cual era muy importante y gracias a la cual me tendría que sacar en la final del periodo académico al menos un 4.0. solo podía pensar en una persona la cual tuviese las calificaciones como para poderme ayudar en este examen: Katherine. Ya que el número de teléfono que me había dado era del hospital y no me daban razón de ella, me dirigí a la dirección que me había dado en el mismo papel, camine por toda la calle 24 buscando dicha dirección y al llegar era un parque , me senté triste en uno de los asientos del parque a pensar el por que de ese papel si no podía localizarla en ninguno de los 2 lugares. Ya iban siendo las 2:40 cuando ella tan hermosa llego al aquel parque alumbrando mi tarde sombría con sus hermosos par de ojos verdes; me miro y dio una pequeña sonrisa  que fue lo único que necesite para andar el resto del día con una sonrisa en la cara. La salude y le pedí ayuda con mi problema, el cual como si fuera una simple suma de 2+2 me lo explico mejor que el profesor inclusive, después de esto me dirigí a casa con cara de idiota pensando tanto en el tema explicado como en sus hermosos labios rojos los cuales se habían estando moviendo por un par de horas y así termine mi tan “normal” día. al otro día volví a ver a Katherine en aquel puente siendo ella esta vez la que miraba al rio como si estuviese inmersa en sus pensamientos, me acerque  y la salude y sin saludo intermedio me conto el por que falta a clase y tiene tan buenas notas, lo que me dijo fue “estoy enferma, y estudio desde casa quería decírtelo ya que posiblemente no dure mucho en este mundo y eres de los pocos que se han interesado en mi” esa noticia me dejo perplejo, el pensar de que mi musa se transformaría en un ángel en poco tiempo me entristeció pero mas me sorprendió cuando dijo, “no quiero que la enfermedad acabe con migo, así que lo are yo misma desde este puente, puede que seas la ultima persona con la que hable” con esto me dio un beso y subió a la barra de protección recién reparada. Lógicamente no dejaría que saltara así que la hale por el brazo haciendo que se bajara, empezó un forcejeo y yo me resbale y caí una vez mas del puente, pero esta vez ella no me ayudaría; solo me alivia el saber que le salve la vida, incluso arriesgando la mía. Lo que es el amor ¿no?.

Una enfermera grita “¡Doctor, doctor el paciente de la habitación 24 acaba de despertar!”, el doctor ”gracias a dios, llevaba un gran tiempo en coma”

¿Saben? Las personas del común dicen que hay cosas que suceden solo en sueños, yo pienso que no es tan malo soñar.

Autor: Jean Pear López.