Hace muchos años
existió en la ciudad de Xium, el "paraíso perdido" de Australia, un
hombre muy rico y viudo llamado Pixos, que tenía una única hija;Su nombre era
carixto; Su belleza parecía proveniente de los dioses, como si cada uno de
estos en su afán de adornar la tierra, tomaran pincel y barro y la formaran con
un soplo de luna.Sus ojos enormes semejaban dos luceros, y su boca de jazmín
atraía a los pájaros que creían ver en su sonrisa un armonioso revoloteo de
blancas palomas.
Así la veía Xionn , su amor imposible, su ilusión fatal.
Ella era la princesa intocable y sagrada. El, un simple artesano que se olvidó
de su oficio para dedicarse a la conquista de carixto.
Ella nunca lo había
visto; En la vio en una oportunidad cuando caminaba por el pueblo con su padre,
y basto para enamorarse perdidamente de Ella.
Un día de junio a pleno
sol, carixto estaba sentada debajo de un árbol de guayaba fresa, buscando que
la sombra la protegiera del calor intenso. Una sombra más oscura que la que le
cobijaba, se acercó a Ella. Carixto se asustó, y miro en dirección al sol. Vio
un rostro hermoso, y su cuerpo tembló de miedo al creer que era el rostro del
dios Apolo, pero después reconoció el rostro de él, de un simple mortal. Era el
rostro de Xionn, el hombre que Ella reconoció al instante como el príncipe que
siempre había esperado en su corazón. Su amor fue a primera vista como ocurre
con los cuentos de antaño. Ella, con nervios, le pidió que se sentara a su
lado.
Después de hablar un
rato sobre sus personas, el decidió declararle de una vez y para siempre su
amor, un amor reprimido que se llevó en su pecho después de haberla visto en el
pueblo con su padre. Ella palidecía, su corazón palpitaba de emoción porque era
la primera vez que un hombre la alagaba de la forma como Xionn lo hacía. Llego
la noche y se acercó un criado de Pixos. Estaba desesperado buscando a Carixto.
Su padre temía por ella. Ella se fue con el criado , no sin antes suspirar por
Xion.
El criado le comento a
Pixos lo que vio, y éste se enojó por celos con su hija. Le prohibió
tajantemente acercarse a Xionn; y ademas Pirox que tenía un miedo terrible a
que su hija se casara pronto, decidió encerrarla en el piso más alto de su
palacio. También temía que su hija se enamorara de un pobre artesano. Lo que no
sabía Pirox es que las flechas de cupido habían dado en el corazón de Carixto.
Después de este percance, Pirox que ni
siquiera conocía a Xionn, le ordeno a su
criado que lo amenazara con desaparecer de la ciudad, y que si se negaba, lo
mataría.
Xionn temió por su
vida, pero fue más grande el amor hacia Carixto, y decidió buscar una manera de
comunicarse con ella sin necesidad de irse de la ciudad.
Xionn sabía que a
carixto le fascinaban las guayabas fresa, por lo que decidió disfrazarse de
vendedor de frutas,con el fin de que no lo reconocieran.Con una canasta llena
de esta fresca fruta, se acercó al palacio de Pirox. Le ofreció la fruta, y
Pirox al ver el porte y la hermosura del vendedor, ademas de su prudencia,
decidió comprarle el canasto, tratando así de agradar a Xionn, pero también de
agradar a su hija con una guayaba fresa, que era la única fruta que le gustaba.
Le agradeció a su padre
el obsequio, porque en el fondo lo respetaba, aunque sin embargo lo estaba
empezando a odiar en silencio al
separarla de su amado. Tomo la guayaba fresa, la empezó a masticar
mecánicamente, porque realmente el apetito se le había muerto,y de repente
sintió algo duro en su boca, que de tragarlo posiblemente se hubiera ahogado.
Lo escupió, y al observarlo más de cerca reconoció que era un papelillo. Lo
abrió y descubrió que era un escrito de su amado Xionn. Su alma volvió al
cuerpo, y temblaban sus mejillas mientras lo leía. Él le comunicaba que la
amaba como nadie en el mundo, que algún día estarían juntos. Que lo esperara
mientras su padre tomaba la decisión de dejarlos disfrutar de eros. Ella
lloraba de emoción y de alegría, aunque al mismo tiempo su corazón sufría al imaginar
la posibilidad de no estar nunca más con Xionn, y que este la abandonara para
siempre.
Xioon iba a la casa de
Pirox cada mes, y Carixto esperaba con ansia la guayaba fresa que su padre le
regalaba, creyendo que así podía remediar el daño que le hizo al separarla de
Xionn. Este le describía con sus cartas, cómo serían sus hijos cuando se casaran. Cómo sería la casa
de ambos, con jardines hermosos y animales domésticos. Carixto se imaginaba
todo esto,con lo cual su dolor desaparecía por momentos, porque al volver a
pensar en la ausencia de xionn, el dolor volvía a retornar. De alguna manera
Carixto vivía en el mundo mágico inventado por Xionn a través de sus cartas,
cartas que sabían a guayaba fresa, guayaba fresa que sabía a amor y a idilio.
Un día Pirox tomo la
guayaba fresa que le vendió xionn,y la probo para luego darle el resto a su
hija. Casi se ahoga al sentir en su boca un objeto duro. Lo escupió y descubrió
una carta. La leyó, y al saber que era de Xionn, se enfureció tanto, que si lo
tuviera al frente, engañando como vendedor, lo mataría. Pero respiro
profundamente como un buda, y reflexiono que si lo mataba podría meterse en
grandes problemas. Decidió decirle al criado que cuando el vendedor volviera,
lo echara a punta pies, y le comentara que ya sabía quién era. Xionn quedó
estupefacto y triste, y pensó que ya no era posible volver a ver a su querida
Carixto. Se encerró en su casa , y lo único que hacía era pintar todo el
recuerdo de ella en cuadros nostálgicos de su alma.
Por su parte, Pixos
decidió tomar una guayaba fresa, y
simulando la letra de Xioon, introdujo en la fruta, de manera milimétrica, una
carta fatal. En ésta se comentaba que Xionn tenía que ir a la guerra, y el principal motivo era porque habían
descubierto su engaño al disfrazarse de vendedor. Sin embargo,Pirox para no ser muy cruel con
su hija, también le hizo creer a esta que era posible el regreso de Xionn, y
así se alimentaria Ella de la esperanza, para no morir .Pirox no presentía el
mal que caería sobre su hija, y sobre su misma cabeza.
Carixto empezó a
enflaquecer, ya no comía y su cuerpo empezaba a marchitar, porque aunque tenía
la esperanza de volver a reencontrase con Xionn, también era consciente de la
crueldad de la guerra.
La luna se apiado de Ella, y decidió en forma
de paloma blanca acercarse a su cuarto. Ella todavía seguía encerrada, porque
su padre temía que se diera cuenta de su treta. El ave se acercó, y en su pico
llevaba un papelillo con un mensaje. Ella se sorprendió, pero al ver los ojos
del ave comprendió que era la misma luna que se apiadaba de Ella.La luna se
despidió vestida de ave, y se perdió en la noche oscura. Carixto abrió el
sobre, y decía lo siguiente:¡NO TE PREOCUPES BELLA MUJER,SI ES POSIBLE TEJER UN
MANTO DE LANA AZUL CON EL NOMBRE DE TU AMADO, TE ASEGURO QUE BAJO LA LUZ DE LA
LUNA EL AMOR LOS COBIJARA!
Carixto se sorprendió
del mensaje, pero al saber que provenía de la bella luna, pidió a su padre le
regalara hilos de lana de varios colores y una aguja para hacer un
manto,distraerse,y así no enloquecer en la cárcel que se le impuso. Su padre hizo lo que le pidió ,
creyendo así que su hija se olvidaría de Xionn para siempre.
Carixto tenía la
ilusión de acabar pronto el manto, y así reencontrarse con su amado. Sin
embrago su padre seguía preocupado creyendo que su hija tenía la ilusión de que
Xionn volvería de la guerra. Así que Pirox decidió decirle con engaño a su hija
que Xionn había muerto en combate. Carixto quedo casi muerta al instante. Su
corazón palpitaba de confusión, y el vació de la muerte se escondió en su seno.
Miro su manto, y al observar que lo había terminado, comprendió que la luna la
había engañado, y odio tanto a su padre y a la luna, que después de mirar con
enojo a su padre, mirar con ira a la
luna desde su ventana,y ocultar su manto en un lugar ignoto, se tiro desde la
parte más alta del palacio, porque como ya dije, en esta parte estaba su
"cárcel", y su cuerpo que semejaba a un dios, quedo totalmente
irreconocible después que golpeo el duro suelo.
La muerte de Carixto
fue trágica. La ciudad o pueblo de xium se enteró al otro día de lo que le
había ocurrido a tan excelsa mujer.
Pirox casi enloquece al reconocer que fue él mismo el artífice de la muerte de
su propia hija.
Mientras tanto, Xion
que no había salido de su casa por mucho tiempo,al mes de haber sido enterrada
su amada, decidió ir al parque del pueblo a dar un paseo. Un viejo amigo le
comento lo de Carixto, y al escuchar la fatal tragedia, un dolor enorme se
agolpo en su pecho. Decidió ir donde Pixos y matarlo, pero le dijeron que se
había ido del pueblo hacia una ciudad desconocida.
Ya sin ánimos de vivir,
con un dolor que le arrancaba el alma, se acercó al árbol donde ellos cruzaron
sus palabras y sus corazones por primera vez; Empezó a recordarla,y al mirar al
cielo sintió odio por los dioses que se la llevaron. Empezó a revolcar la
tierra como un perro en busca de un hueso, y se encontró con un objeto extraño
de color azul y bellamente bordado. Lo
tomo, lo reviso, y creyó que era un objeto que un peregrino había dejado tirado
en ese lugar. Pero lo que más le pareció extraño, era que su nombre estaba
escrito en el manto. Aunque realmente no era su nombre completo, pues le
faltaba la "N". Tan solo decía "Xion".
Se llevó el manto para
su casa, empezó a recordar a Carixto, y hasta se imaginaba que era ella quien
lo había bordado con sus delicadas manos.Con el manto secaba sus lágrimas, y
para no quedarse sin hacer nada, decidió terminar la "N" que le
faltaba, después de tomar unos hilos y una aguja. Al terminarla, su corazón
concibió una idea fatal. Ya su vida sin Carixto era imposible. Tomo la decisión
de buscar en la cocina, una cocina humilde de artesano,un frasco que estaba
medio lleno de cianuro, veneno ancestral
que mata al instante. Se acercó a la
cocina mientras recordaba a su amada; Destapo el frasco, lo olio. Se imaginaba
como después de morir , Ella estaría con él en alguna dimensión. Eran las doce de la noche, su casa vista
desde arriba estaba envuelta entre árboles, alejada del pueblo. Todo era
oscuridad, y quien viera a Xionn con aquel veneno le gritaría que no lo
hiciera, que la vida tenía más oportunidades. Pero él ya era sordo, ya él había
tomado la decisión de marchar para siempre, y buscar a Carixto, como orfeo a
euridice, en el profundo hades.
Sin embargo, escucha un
ruido. Era un ruido sordo. Xionn ya tenía la boquilla del frasco en sus labios,
dispuesto a voltearlo y derramarlo en su
garganta, y así morir al instante. Pero le entro la curiosidad de escuchar el
ruido. Era la puerta, si, tocaban la puerta. Dejo el veneno a un lado sin
probarlo. Se sorprendió que tocaran la puerta a esa hora. Se acercó a abrirla
sin miedo , porque igual ya su muerte se aproximaba, y ademas no había dejado
la idea fija de tomar el veneno. La abrió lentamente. Todo era silencio, todo
oscuridad. Solamente se veían las sombras de la noche, que se avivaban cada vez
que el viento y @la vela, única vela que alumbraba la casa de Xionn, bailaban
al ritmo de lo inesperado.Cuando la puerta termino de abrirse totalmente, la
oscuridad era tal que Xionn no alcanzo a reconocer a nadie, y pensó que el
ruido era producto de su excitada fantasía.
Sin embargo los rayos de la luna le permitieron visualizar unos ojos enormes;
inmediatamente reconoció a una mujer hermosa como la misma luna. Era una
hermosa mujer la que tocaba su puerta, parecida a Ella.Quien tocaba la puerta
no era una peregrina, pero tampoco era Ella. ¿o si era Ella?, todo era confuso
para Xionn. Después de observarla por un tiempo, reconoció que era Ella, pero
más hermosa,parecida a la fresa del amor, de la que todo ser humano aspira
masticar. Todo era silencio, todo era asombro. Ella se acercó a él, se
abrazaron. Todo fue luz, todo fue encanto. Lloraban sin esfuerzo. Lloraban sin
necesidad de palabras.El amor superaba el temor a los fantasmas o
apariciones.Se había completado el manto de lana, mientras la luna, la luna
desde arriba , estaba completa, llena, pero llena de amor.
Autor: Walter Gaviria
No hay comentarios:
Publicar un comentario